Actualmente, existen cabinas de hidromasaje cuyos masajes son una experiencia totalmente nueva.
Te aliviará las visitas al fisioterapeuta, gracias a sus increíbles masajes, mientras disfrutas de un cálido baño.
Cabinas de Hidromasaje
Una de las grandes ventajas de tener una cabina de hidromasaje es que, puedes cubrir distintas partes del cuerpo donde necesitas un masaje, ya sea por dolor, incomodidad o molestia.
En cuanto a los tipos de masajes y tratamientos que pueden ofrecernos las cabinas de hidromasajes, debemos diferenciar entre los dos tipos que existen:
- Cabinas de hidromasaje simples.
- Cabinas de hidromasajes con función sauna.
Con las primeras, como es obvio, obtenemos un masaje de agua, gracias a la presión que proyecta el agua emitida por las boquillas.
Los distintos masajes dependerán de la ubicación que tengan los chorros y la manera en que se produzcan. Ya que, pueden ser:
- O bien, de forma pulsante. Donde el líquido se esparce de forma intermitente y en chorros vigorosos.
- O bien, de forma constante. En la cual se emite un chorro de agua permanentemente sobre una misma zona corporal específica.
Las zonas que podemos tratar con este tipo de cabinas de hidromasaje abarcan, desde la zona cervical hasta la zona lumbar, pasando por la zona dorsal y la zona plantar.
Podemos escoger tratar cada una de las zonas por separado o complementarlas.
Por otro lado, las cabinas de hidromasaje con función de sauna, tratan de generar vapor de agua dentro de la cabina, con una temperatura que oscila entre 50ºC y 70ºC, y con alta humedad.
De este tipo de cabinas los beneficios, al igual que con la anterior, son varios.
Entre ellos encontramos la desintoxicación de la piel, la purificación del organismo, la mejora del ritmo cardíaco y el flujo circulatorio, entre otros.